Cuando en mi pueblo, Villanueva de Gállego, se puso en marcha la Universidad San Jorge, no todo el mundo acogió la noticia con buenos ojos, ya por que fuera una Universidad Privada, ya por que estuviera detrás el Opus Dei, o por lo que fuera, no era demasiado el entusiasmo que había entre la población. Otra cosa distinta fué el entusiasmo de algunas autoridades.
Empezaron las disciplinas y fueron pasando los cursos, y hemos visto, que en una de sus carreras, concretamente en Fisioterapeuta, cada año son mas los estudiantes de otras comunidades españolas los que viene aquí a estudiar, pero principalmente se llena de estudiantes universitarios del sur de Francia.
Como en todos los colectivos, hay un porcentaje mínimo de impresentables, pero un 95% de los chavales y chavalas franceses que conviven con nosotros en Villanueva son gente estupenda.
Dominan el castellano con rapidez.
Tienen un nivel de educación y cordialidad bastante envidiable.
Han ocupado, con sus alquileres prácticamente todos los pisos vacíos, que la crisis había dejado fuera de mercado.
Los bares restaurantes y cafeterías funcionan, gracias a ellos, a pleno rendimiento en época de estudios.
El pueblo esta lleno de juventud y alegría sana y cordial, que buena falta nos hacía.
Sin darnos cuenta, se han ido metiendo a formar parte de nuestras vidas y de nuestro día a día.
Por eso hoy al saber que el final de la historia de la desaparición de Sarah y Julién, cuando viajaba a su Pau natal a pasar el puente, ha terminado en tragedia, nos damos cuenta que nos duele tanto, como si de alguien nuestro se tratara.
Posiblemente así sea.
Descansen en paz los dos chavales, y un abrazo para sus familias, y sobre todo para sus compañeros y amigos que habrán de seguir adelante con sus estudios con toda la amargura en el alma.
En éstos momentos poco se puede decir, salvo que les damos mucho animo, y que sepan que
VILLANUEVA ESTA CON VOSOTROS.(O por lo menos yo)
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